domingo, 14 de febrero de 2010

LIBRE TE QUIERO

 
 
  Una canción de Amancio Prada, todo un poeta, trovador de trovadores, en estos tiempos de la prisa y de lo comercial. Para mi es un gran cantautor y hoy me ha transportado a otras épocas de mi vida.
  Lo sigo desde hace mucho tiempo y no dejan de impresionarme sus letras y su forma de cantar a Rosalía de Castro, a Miguel Hernández  a Antonio Machado y a otros grandes de la poesía.
  Hoy lo he escuchado de una manera especial, he mirado atrás en el tiempo y creo que voy asumiendo que soy la misma que ayer aunque con más limitaciones.
  He escuchado canciones que me han hecho sentir de la misma manera, con la mismas inquietudes.
  Mi alma sigue siendo la misma, aunque me limite lo físico, aunque no sea capaz de ir en un salto a la calle, ni sea capaz de recorrer el pasillo de mi casa a la misma velocidad que antes, sigo estando aquí, sigo siendo yo.
  Y es que hace algún tiempo que aunque sé quién soy... lo que soy,  no soy yo.
Es hora ya de reconocerme de nuevo.

miércoles, 10 de febrero de 2010

LAS ACERAS DEL DOLOR


Por las aceras del dolor camino desde siempre, desde niña.
No he vivido en otras calles,  ni he transitado otras aceras.
Las aceras del dolor son frías, oscuras y hacen daño a quien pasea.
Sus bancos sombríos  invitan a hundirse en la dureza de su asiento.
Me he acostumbrado a vivir en mi calle,  
"calle del aguanta aunque no puedas",
sin otra compañía que mi amigo el cansancio y mi torpe caminar.
Alguna vez he recorrido otras calles sin dolor, pero de paso, de puntillas,
mi paseo ha sido corto, efímero.
Nada más empezar a caminar, venía a por mi el guardián de mis aceras.
Las aceras del dolor no entienden de buenas filosofías, ni de propósitos,
no quieren paseantes atrevidos, valientes, que limpien la calle de espinas.
Si alguien se atreve y se rebela es silenciado con dolor y más dolor.
En mi calle las tiendas son iguales aún con distinto escaparate,
en todas se venden caramelos de colores para aliviar los dolores del aire,
enrarecido por la bruma
Unos son azules  para la "fibro", otros son naranjas para las piernas,
rojos para el estómago,  de dos colores para el cansancio,
los hay también blancos para el dolor del alma...Otros son...
En mi calle nada va a cambiar, lo sé,  seguiré recorriendo sus aceras,
seguiré viviendo aquí, en la calle "del camina hasta que puedas".


lunes, 1 de febrero de 2010

FLORES PARA VOSOTR@S

  Gracias a tod@s por vuestros comentarios. Es reconfortante saber que estáis ahí.
  Bendito el día que me tropecé con el blog de Perséfone, leyendo algunas cosas sobre la polio. Ya sabéis cómo es google, que con las palabras te lleva a veces a páginas insospechadas.

  Me tropecé con ella y a través de su página os fui conociendo a tod@s. A ti Leonor, que con tus hadas me llevaste a pasear por tus dos blogs ; a ti Paco, que con tus interesantes escritos, hiciste que volviera cada día a leerte; a ti  Bidawe, tan llena de vida; a Bego, que un día al abrir mi página, me sorprendió con su comentario; a Yolanda, que me ayudó con el fondo de mi blog; a Rosa, entregando siempre su amistad; a Mariajo, que tan bien nos informa a través de su blog "Mi estrella de mar"... En fin a tod@s  estas personas y a tant@s otr@s que voy conociendo poco a poco.
  Como ves tengo mucho que agradecerte, sí a ti, Perséfone. Una persona a la que admiro desde aquí, por lo que escribe, por lo que dice y por cómo lo dice, por tener siempre la palabra adecuada y justa y por las coincidencias que intuyo entre líneas. Cuando te leí aquel día era como ver mi día a día. Quizá porque ante adversidades parecidas, intentamos sobrevivir de foma similar o por cosas del Olimpo, quién sabe.       
 
  A los demás, que aún sin tener ningún blog, os acercáis al mío a dejar vuestro granito de arena, gracias.
  A Berta, por salir a mi encuentro nada más enterarse que había hecho un blog.
  A Rafa, por ser mi compañero en las alegrías y en las penas, en nuestra lucha diaria, por alentarme a hacer este espacio y por sus comentarios, tan verdaderos e importantes para mi.
  A Angels, mi hermana en la vida real, qué decirte que tú ya no sepas. Siempre tendré presente que tú fuiste la primera, que el tuyo fue el primer comentario que recibí en mi blog. No olvidaré tampoco que fuiste tú la que me regalaste esta ventanita al mundo, este portátil que me ayuda a vivir.
  A mi sobrino Nico, por aguantarnos a su madre y a mi cuando nos surgen las dudas sobre internet y nuestras cuentas de google.
  A mi hija mayor Marina, que entre la timidez y la valentía hace comentarios tan bonitos. 
  A mi pequeña, Marta, que por cuestiones de la edad sólo se ha atrevido a colocarse con su avatar favorito, entre mis seguidores.
  A Alex, ese "hijo adoptivo", que tengo desde hace ya más de un año, le agradezco infínitamente que en su momento me ayudara a hacer este blog. Sin su ayuda esto no sería posible.
 
                           A tod@s gracias y un abrazo.